La esperanza de vida en el mundo está en continuo crecimiento, muchos expertos en este tema garantizan la posibilidad de vivir hasta edades cercanas a 120 años en las próximas décadas. Si esto realmente ocurre debemos estar preparados física y mentalmente para poder ser personas activas con estas edades y poder aprovechar al máximo nuestro ciclo de vida.
Una buena alimentación, sin duda, nos permite mejorar nuestro funcionamiento biológico y al mismo tiempo reducir la probabilidad de sufrir algunos tipos de enfermedades. Nosotros somos los únicos interesados y por eso debemos ser los principales secuaces de estos estilos saludables de alimentación de modo a mantenernos sanos y activos.
Con este aumento de la esperanza de vida se ha empezado a hablar sobre la “Silver economy”. Este concepto se puede definir como toda esa red de producción y distribución y todo el consumo de productos y servicios destinado a utilizar el potencial de compra de las personas mayores de modo a satisfacer sus necesidades de consumo, vida y salud.
LA IMPORTANCIA DE LA ALIMENTACIÓN
De la misma forma que a un coche necesita un buen combustible para su buen funcionamiento, nuestro organismo también necesita una buena alimentación.
La falta de tiempo y el desconocimiento sobre nuestras necesidades nutricionales ha sido uno de los grandes problemas en la calidad de nuestra alimentación. Una buena alimentación nos permite mejorar tanto nuestra forma física como nuestra salud mental. Hoy en día hay estudios que demuestran las personas que se alimentan de una forma correcta tienen una mayor voluntad para realizar sus tareas diarias y un mayor nivel de autoestima.
La lista de enfermedades que se pueden evitar siguiendo una buena alimentación es muy extensa, entre ellas la obesidad, cáncer, artritis, disturbios hormonales, anemia, diabetes entre muchas otras y por otro lado nos permite prevenir el envejecimiento de nuestro cuerpo de manera anticipada. Siguiendo una buena alimentación conseguimos también fortalecer y optimizar el funcionamiento de nuestro sistema inmunológico que es el encargado de garantizar nuestro bienestar y de esta forma nuestra calidad de vida.
Una mala alimentación puede dificultar nuestro rendimiento en el trabajo y en otras actividades diarias, esto porque también puede causar mal humor, cansancio, fatiga, problemas a la hora de dormir, dificultar nuestra concentración y problemas de memoria. Por lo que es algo que puede impactar en la vida de todo tipo de personas, desde niños que están empezando sus estudios, hasta las personas mayores que estar en la plenitud de sus capacidades le sirve de gran ayuda para realizar sus tareas diarias.
La ingestión diaria de verduras, legumbres, frutas y proteínas con bajas calorías son esenciales para mantener una buena alimentación.
Los alimentos procesados tienen un gran nivel de grasas saturadas, sodio y pobres en vitaminas y minerales. Por lo que este tipo de alimentos deben ser completamente eliminados de nuestra dieta.
Para muchas personas puede ser bastante complicado seguir una buena alimentación, pero todo es cuestión de adaptarse y hacer que este tipo de alimentación sea una costumbre más que una obligación. De la misma forma que actualmente existe un elevado numero de profesionales nutricionistas que se dedican a asesorarnos de manera a mejorar y optimizar la forma como comemos y que comemos.
Muchos empresarios saben que cada vez este tipo de alimentación tendrá que identificarse como una obligación para la sociedad, y están empezando a desarrollar proyectos muy relacionados con las buenas costumbres alimentares. Como pueden ser lanzamientos de productos saludables, apertura de cadenas de restauración en la que los productos ofertados siguen los consejos nutricionales de expertos, empresas que se dedican a llevar las comidas semanalmente a tu residencia, etc. Este tipo de proyectos pueden ser muy rentables y al mismo tiempo producir un impacto positivo en la sociedad.
LA “SILVER ECONOMY”
Con la evolución de la sociedad, cada vez hay más personas mayores que han trabajado toda la vida y que llegan a un momento de su vida en la que su única preocupación debe ser disfrutar.
Teniendo en cuenta el cambio que se está produciendo en la sociedad, con un conocimiento del impacto que una buena nutrición y alimentación puede tener en la vida de las personas, este grupo de personas mayores sabrá identificar que cada vez tienen más tiempo para disfrutar de la vida después de su jubilación y sentirán la necesidad de invertir más en ellos y en mejorar su calidad de vida.
¿Será que este mercado está completamente explotado? ¿Será que las personas mayores tienen todo lo que necesitan?
Este grupo social, cada vez busca más la simplificación de sus tareas diarias. Quieren que todo sea fácil y que no les ocasione ningún desafío, debido principalmente a que muchos de ellos empiezan a ver limitadas algunas de sus capacidades físicas y mentales, como puede ser la fuerza, la memoria, la capacidad de aprender nuevas cosas etc.
La importancia de direccionar proyectos empresariales a este grupo social puede ser bastante rentables. Muchos estudios muestran el potencial de rentabilidad que se puede obtener realizándolos y el gran impacto positivo que puede tener en las comunidades mejorando la calidad de vida de muchas personas. Es muy importante desarrollar proyectos que no tengan un objetivo meramente económico y que si busquen también mejorar la calidad de vida de las personas y comunidades en las que se encuentran.
Bibliografía
- Nutrición. (2020). Retrieved 24 March 2020, from https://www.importancia.org/nutricion.php
- Feel, F. (2020). La importancia de la nutrición en la vida diaria – Functional Feel. Retrieved 24 March 2020, from https://functionalfeel.com/la-importancia-la-nutricion-la-vida-diaria/
- The Silver Economy. (2020). Retrieved 24 March 2020, from http://www.silvertourism.eu/en/the-project/silver-economy-tourism
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